30 de noviembre de 2015

Tan solo es un "hasta luego Cienciano"

CUSCO LLORA POR DESCENSO DE CIENCIANO

Con la frente en alto Cienciano se despidió de la primera división del fútbol peruano. El equipo cusqueño no dependía de sí mismo para mantener la categoría, pero hizo lo más que pudo.
CIENCIANO del Cusco. Más que un PERÚ
El Cusco no deja de llorar. Es que en el mismo año en el que Freddy Ternero dejó este mundo, Cienciano, el equipo que más logros le dio al país futbolísticamente hablando, bajo su mando, pues perdió la categoría tras 31 años en la élite y vuelve a la Segunda División.

Quedará para la estadística del Clausura del 2015 que el “Papá” se impuso 3-0 a San Martín con goles de Carlos Orejuela (9’) Mario Tajima (18’) y Carlos Uribe (36’), todos en el primer tiempo.

TANTO NADAR...

Sin embargo, ni así pudo evitar el descenso, puesto que dependía de otros resultados y no todos se dieron para su mala suerte.

Cuando el árbitro tocó el pitazo final, el DT rojo, Paul Cominges, con lágrimas en los ojos, movía la cabeza para indicarles a sus jugadores que no se había dado el milagro, entonces, como en un sepelio, hubo conmovedoras escenas de dolor.

Los jugadores del cuadro imperial se abrazaron y tampoco pudieron evitar las lágrimas de cólera y decepción, y de impotencia también, por la desgracia que les toca vivir.

SOLO ES UN HASTA LUEGO

El Perú entero recuerda las hazañas de Cienciano cuando se coronó campeón de la Copa Sudamericana, en el 2003, y de la Recopa, en el 2004; precisamente ayer esos trofeos fueron paseados en el Garcilaso.

Sin embargo, 12 años después la historia es otra, el cuadro rojo ha desaparecido de la máxima categoría.

Lo mataron los resultados adversos, los técnicos poco dedicados y, sobre todo, los malos dirigentes.

Los resultados de los otros partidos no ayudaron y los puntos perdidos en mesa terminaron por llevarlo a Segunda.

Sin embargo, pese al sufrimiento en el Garcilaso de la Vega (y por qué no decirlo, en todo el Perú) sus jugadores se despidieron de Primera con la frente en alto, sin poder contener el llanto y prometieron que el “Papá” volverá pronto a la máxima categoría. 

Ahora solo queda decir adiós, “Papá”, y gracias por todo; seguramente, como dicen tus jugadores, volverás pronto para demostrar nuevamente que “sí se puede”.

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